Entre los indios
Entre los indios, de César Aira publicada por la editorial Mansalva en el año 2012. Si bien lo primero que nos surge...
En los años posteriores a la primera guerra mundial, en París, ciudad que hacía varios siglos venía presenciado ya el florecimiento o la desaparición de muchas escuelas artísticas o literarias, algunos jóvenes de formación y culturas distintas, pero unidos por el descontento del reciente conflicto de la primera guerra mundial y por la sociedad que lo había provocado y sufrido iniciaron una actividad que al principio no parecía distinguirse de la de otros movimientos artísticos o literarios análogos pero pronto comenzó a distinguirse y no tardaron en definirlo como surrealismo. El surrealismo influyó mucho en la literatura, las artes y el gusto de la primera mitad del siglo XX (por lo menos en la Europa occidental y en América) y ha alcanzó y penetró vastos sectores de la cultura de masa, como la publicidad y la seudociencia.
El surrealismo es un automatismo psíquico puro mediante el cual nos propone expresar, sea verbalmente o por escrito, el funcionamiento real del pensamiento. Dictado por el pensamiento fuera de todo control ejercido por la razón, al margen de toda preocupación estética o moral… el surrealismo se funda en la creencia en la realidad superior de ciertas formas de asociación hasta ahora descuidadas, en la omnipotencia del sueño, en el juego desinteresado del pensamiento. Tiende a destruir definitivamente todos los demás mecanismos psíquicos y a sustituir a éstos en resolución de los principales problemas de la vida…
Estos tres aspectos son fundamentales para que podamos hablar de surrealismo en sentido estricto, con referencia a una actividad de determinadas personas reunidas en grupos de composición variable alrededor del mayor teórico del movimiento, André Breton, individuos y grupos que encarnaban alternativamente el movimiento surrealista, organizado según principios no distintos de los de una orden religiosa o de un partido político.
Tribunal de pintores, témpera sobre papel, 1938. Juan Batlle Planas
No tenemos nada que ver con la literatura. Sin embargo, cuando sea necesario, somos capaces de servirnos de ella como cualquier otro. Es un medio de liberación del espíritu y de aquello que se le parece…
Nosotros no pretendemos mudar nada en los errores de los hombres, pero pensamos demostrar cuán frágiles sean sus pensamientos y en qué estructuras movedizas, sobre qué cavidades, ellos hayan fundado sus vacilantes residencias…
Somos especialistas en la rebelión… El surrealismo no es una forma poética. Es un grito del espíritu que vuelve a retorcerse sobre sí mismo y está decidido a romper desesperadamente todo lo que le estorba.
Fotograma portada de la película, Un perro andaluz de Luis Buñuel, 1929
Podríamos afirmar como una primera aproximación que intervienen el surrealismo:
Los amantes, Oleo, 1928 René Magritte
En esta tensión aparece la posibilidad de una solución unitaria y sintética: si el hombre está dividido entre el universo de la llamada realidad racional y el de la surrealidad irracional, el objeto de las prácticas surrealistas consistirá no solo en expresar aquella parte oscura, y comúnmente condenada, sino en soldarla en unidad con la parte diurna; en restituir al hombre a sí mismo, en promover una unidad en la que ya no se distinga entre razón y deseo, entre placer y trabajo. Gracias a esta resolución de los contrarios —que al presente sólo puede alcanzarse en momentos aislados—, ya no habrá ni poesía o arte, porque la poesía será hecha por todos y coincidirá con el lenguaje.
Entre los indios, de César Aira publicada por la editorial Mansalva en el año 2012. Si bien lo primero que nos surge...
Del conceptualismo, los retratos por encargo, las naturalezas muertas o bodegones inquietantes a las ninfas...
En la siguiente entrada se van a abordar algunos aspectos de la polifonía, a partir del enunciado que construye Belén...
0 comentarios